Entre el 80-90% de los productos transportados mundialmente lo hacen por transporte marítimo.

Viajar en ferry puede ser la mejor opción para el transporte de mercancías bien sea por costes, comodidad o rapidez. En este artículo analizamos por qué este tipo de transporte de mercancías puede ser tu mejor opción.

Ventajas de viajar en ferry

Si comparamos el transporte marítimo con el transporte por carretera o terrestre, podemos destacar las siguientes ventajas del transporte por agua:

  1. Reducción de costes variables: el transporte por carretera genera costes de peajes, carburantes y de mantenimiento del propio vehículo. Sin embargo, por vía marítima el precio es fijo.
  2. Tiempo: la posibilidad de hacer el descanso en el ferry puede permitir al vehículo recorrer más kilómetros en un menor espacio de tiempo. También se evitarían los contratiempos que puedan surgir en la carretera, desde atascos hasta accidentes o restricciones de movilidad.
  3. Seguridad: tanto para el transportista como para la mercancía, al evitar el uso de las carreteras y los descansos a la intemperie, así como las condiciones climatológicas adversas.
  4. Necesidad: para llegar a determinados lugares, como en el caso de Reino Unido, es imprescindible elegir la vía marítima.

Tips/ Consejos para viajar en ferry

Para afrontar estos viajes de la mejor forma posible, os mencionamos algunos consejos que puedan ayudaros en vuestra travesía:

  1. Reservar con antelación: un ferry tiene un número limitado de plazas, por lo que al cubrir este aforo la reserva entraría en “lista de espera”. Además, en ciertos períodos del año con más tráfico de mercancías, algunas rutas se llenan antes.
  2. Tipo de billete: dependiendo de la ruta solicitada, pueden tener establecidos horarios de salidas fijas (billete cerrado) o indeterminadas salidas a lo largo del día (billete abierto). Estos últimos, suelen tener una validez de varios días, mientras que el billete cerrado únicamente puede canjearse por la salida del día y hora solicitados inicialmente.
  3. Puntualidad y check-in: para evitar perder el buque es necesario tener previstos posibles contratiempos de camino al puerto, ya sea por averías del vehículo, tráfico o demás circunstancias. Además, las navieras establecen un horario límite para realizar el check-in, que puede abarcar incluso varias horas antes de la salida, pudiendo incrementarse en el caso de transportar mercancías peligrosas o animales.
  4. Documentación, aduanas y tasas portuarias: es necesario llevar toda la documentación del conductor y del vehículo físicamente para acceder al puerto. Además, cada país establece diferentes medidas Covid y reglamentos de aduanas, por lo que es necesario informarse de manera previa al viaje. Algunos puertos específicos también pueden cobrar tasas portuarias o cargos de manejo de terminal.
  5. Asegurar el vehículo: en el caso de que la policía o miembros de la seguridad realicen un control y encuentren polizones, tanto la empresa de transporte como el conductor serán multados.

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Como hemos citado antes, el transporte marítimo mueve cerca de un 80-90% de los productos transportados mundialmente. Descubre en esta aplicación de Marine Traffic todos los transportes marítimos en tiempo real, te sorprenderá la cantidad de embarcaciones en activo.